El grupo valenciano lleva al Festival de Música Renacentista y Barroca de Vélez Blanco ‘Afectos de un alma enamorada’, un programa que recupera canciones que sonaron hace tres siglos por última vez
El patio del Castillo de Vélez Blanco acogió en la noche del jueves melodías y sonidos que no se habían vuelto a escuchar desde hace 300 años. En una especie de reestreno tres siglos después, las paredes del castillo hicieron vibrar la música de villancicos, que no música de Navidad, que sonaban en los conventos de monjas, durante sus actos de profesión, en el siglo XVIII. El grupo valenciano Música Trobada eligió para su actuación en el Festival de Música Renacentista y Barroca de Vélez Blanco (FestiMUVB) un programa de cinco piezas seleccionadas tras una profunda investigación en archivos de toda España. El resultado es Afectos de un alma enamorada. Sobre los villancicos para la profesión de monjas de Pasqual Fuentes Alcàsser, que sorprendió y gustó a los casi 300 espectadores que subieron al castillo.
Afectos de un alma enamorada, que ha iniciado su recorrido artístico en el FestiMUVB y comienza una gira por diversos festivales de España, incluye cinco piezas que los miembros del grupo han reunido desde archivos diversos.
Música Trobada explica que esta música de Pasqual Fuentes Alcàsser, nacido en 1721, es la que se utilizaba en los actos en los que las monjas profesaban sus votos como monjas. El programa que ha llevado a Vélez Blanco es una “visión en femenino, histórica y actual” de aquella música. Para ellos, este compositor “es uno de los más ricos e interesantes por los cambios profundos en materia musical” que supuso. Estudiar a Fuentes Alcàsser ha supuesto para el grupo una investigación difícil, resultado de la dispersión de sus obras. La catedral de Valencia, Cádiz, El Escorial, Tarragona, Barcelona, Valencia o Alicante son algunos de los lugares que guardaban esas partituras o documentación relacionada con ellas.
Tras su estreno en el festival de Vélez Blanco, Música Trobada llevará este programa en el próximo mes de agosto al Festival Internacional de Música Antigua y Barroca de Peñíscola y al Festival de Música Antigua de Pirineos, entre otros.
El grupo Música Trobada nació, según cuentan ellos mismos, “por un interés compartido hacia la música antigua y barroca”. La formación la componen músicos profesionales que han estudiado en el Conservatorio de Valencia y en otras instituticiones europeas de gran reconocimiento. En escena, combinan la recuperación y transcripción del repertorio del siglo XVIII valenciano con la interpretación de repertorio internacional. El grupo cuenta con tres integrantes permanentes: la soprano Pilar Moral, la violencellista Regina Fuentes y el continuo y director Francesc Valldecabres. A partir de ahí, la plantilla varía según las necesidades del programa. En Vélez Blanco comparecieron también el alto Hugo Bolívar, los violinistas Enric Llorens y Victor Yusà, así como el violonchelista Carlos Montesinos.
La jornada del FestiMUVB incorporó ayer una novedad que resultó en una actividad de calle especialmente atractiva. A mediodía, el Paseo musical. Ministriles en día de fiesta recorrió el patrimonio renacentista de Vélez Balnco, considerado como Bien de Ingerés Cultural, con la música como hilo argumental. A cargo del grupo de Ministriles, Francisco Blay, quienes entre pieza y pieza, daba paso a Dietmar Roth, a cargo de una magnífica explicación histórica que llevó a los acompañantes del paseo, siquiera por un rato, a la Vélez Blanco de varios siglos atrás.