Gran concierto el que se pudo oir en el Salón del Triunfo del Castillo de Vélez Blanco. La Galanía y Raquel Andueza, junto con el contratenor José Hernández, dieron forma musical a las pasiones humanas que despierta el amor. Y lo hicieron con el sentimiento y la perfección técnica que caracteriza a esta agrupación.
Con algunas de las más bellas arias y duetos de amor para alto y soprano del barroco italiano fueron creando una pequeña trama que articuló toda su actuación. Fue el amor el elemento central de la pequeña dramaturgia representada, bajo cuyo paraguas se resguardaron la pasión, los celos, la belleza, el tormento o la traición.
Ambos pusieron voz a los protagonistas y mostraron un inagotable arsenal de matices imprescindibles para dar todo el espacio a los afectos barrocos de la música interpretada. La voz sensual y el estilo sutil y refinado de la soprano Raquel Andueza, ya conocida en este Festival, y la de José Hernández, bien colocada, sin fisuras y de impecable dicción, crearon momentos de gran expresividad y magia ante los que era difícil no rendirse.
Junto a ellos destacó el refinamiento sonoro y empaste del grupo instrumental de La Galanía, complemento ideal para cohesionar ambas voces y para que las notas tomasen vuelo en ese espacio mágico del Castillo de Vélez Blanco.
Otra gran noche del Festival de Vélez Blanco. Un gran acierto contar con La Galanía y con tan hermosas voces.