El grupo de música barroca con más de cuatro décadas de trayectoria pone en el escenario un programa con obras de los siglos XVII y XVIII de Europa, América y Asia.
La Folía, uno de los grupos de música barroca de más larga trayectoria en el panorama musical internacional, estrenó ayer en el Festival de Música de Vélez Blanca De aquel inmenso mar, un programa que quiere homenajear a Magallanes y Elcano a través de un recorrido por las músicas en torno a las rutas ibéricas de circunnavegación. La Folía llevó en la noche del jueves al escenario del claustro del convento de San Luis una extensa y muy cuidada selección de obras procedentes de archivos de todo el mundo. Su director, Pedro Bonet, ha sabido elegir músicas y momentos representativos de los avatares de aquella primera circunvalación, una ruta de la que el propio Bonet explica “fue explorada inicialmente por los países ibéricos y luego transitadas por otras naciones europeas”.
De aquel inmenso mar es un proyecto multilingüe. Con la flauta en el centro del programa, la soprano Celia Alcedo interpretó en varios idiomas, siempre con brillantez: quechua en la primera obra, el Hanacpachapa Cussicuinin de Juan Pérez Bocanegra, una obra del Perú del siglo XVII. Se trata de un himno mariano que es la primera composición polifónica impresa que se conserva. Español, italiano, latín, portugués e incluso camboyano son las lenguas que se oyeron en el claustro del convento. Un claustro repleto de público que quedó encantado al final de la actuación.
La Folía trajo ayer a Vélez Blanco un grupo liderado por su director y fundador, Pedro Bonet, fundador del grupo y catedrático emérito de flauta de pico del Real Conservatorio Superior de Música de Madrid. Junto a él, la soprano Celia Alcedo y Belén González Castaño, que tocó flautas de pico también. Completaron la formación Guillermo Martínez, que interpretó el chelo barroco y Ramiro Morales, que tocó diversos instrumentos de cuerda, entre ellos la guitarra barroca y la tiorba.